miércoles, 24 de agosto de 2011

Poemas del limo (3)

LUCERO EN EL MAR

Recordando a Doña Julia
y la muerte de su hijo.



Cayó de los peñascos

como lucero en el mar

que dicen que fue un hombre

que fue la Estrella Polar

que le mataron a tiros

que enamorada del mar



cayera quien fuera

qué pena ¿verdad?




NANAS PARA TODOS



Buches de guano

me soba el viento

buluba buluba

carotina de adviento



Zumba de noche

el sabio Soboche

(Frasquina te siente

pero no la revientes)



Bula buluba

jazmín entre cardos

de viento los buches

la nube pigmea

sobre luna, pegote

¡No seas zumba, Soboche!



Arropé

que rin-rin cargas

no te subas a la parra

que mi romera tié

sabroso corsé

Para cin-cin tar

mi morenita tié

resinado compás

La sevillana, gá

abajó la persiá

y el colibrí del sol

caló, ¡enmudeció!



No te muevas Crisantema

¡no me quiebres los lirios!

que los angelillos ratones

¡van robarte los higoooos!



¡Arrope!

¡Vamos a bailar

con el zum de Zapatiesta

la divina hermandad!

Pone el uno, pongo el dos

¡Rabión, que somos tres!

Arropé…

adormite leré




MAMBRÚ SE FUE A LA GUERRA



Mambrú se fue a la guerra

y se quedó con ella…

Nicanor tocó el tambor

tocó requetebién

¡Más vale menos repique

y más gachas y sartén!

que Mambrú se fue a la guerra

y se quedó con ella…



Hay un río colorado

más abajo del molino

dicen que fueron los lobos

dicen que fueron los niños

que Mambrú se fue a la guerra

y se quedó con ella…



Madrugaba el Conde Olinos

la víspera de San Juan

Todas las doncellas pobres

se pusieron a temblar

que Mambrú se fue a la guerra

y se quedó con ella…



No tienen mis penas remedio

por años que aguarde a tu puerta

Tu padre puso la sota

y el basto sobre mi cabeza

que Mambrú se fue a la guerra

y se quedó con ella…




MORIR



Morir todos los días

sin luz, sin velas

poco a poco, sin entusiasmo

Morir de pie o tumbado

(da lo mismo

a la nueva geometría

del espacio)

Morir sin más o menos

flores o lágrimas

duelos o cirios

bajo el epitafio estándar

de los hombres sin bigote

Morir porque si

porque todos morimos

irracionalmente

de la mentira de ayer

del embudo atascado

del corazón – el pobre

tan quieto en su ritmo

tan absurdamente metáfora—

Morir, morir

porque hemos llegado

al último aburrimiento




NANA DEL LIMO



¡Limo limonero

santero de estrellas

carinegro

sandunguero

boliaguas, balilalunas

repúcheritauñas!



Limo carcavón

centinela guadañista

de los lirios



Limo chupetero

chamusquero

hambriento miligailas

todo fino

todo broncialbino

¡morterito del muertero!







miércoles, 10 de agosto de 2011

Poemas del limo (2)




SIESTA



Estaba recluido en mi pequeña paz

regurgitándome

(cueva del silencio, permanencia)

y fue el viento que se agita contra la ciudad gris

y fue y vino

entrando Dios sabe por dónde

para llevárseme un temblor

(él, que gritaba contra la ciudad gris

bañada en muerte de piedra)

Mas, ¿por qué desperdiciar ternuras

aún tan leves, pobres, propias como un temblor?

¡Mi temblor desprendido!

Voy detrás de mi temblor con un cazamariposas

el silencio de aquí

alfarea un sueño profundo

el cazamariposas se deshace

en el murmullo de allá

(¡ay el viento contra la ciudad de piedra!)

Más temblores desprendidos

por el viento

Más angustias tontas

El silencio acaramela soledad





NO ERA POR CELOS



No era por celos

que me puse a espiar

el sueño que dormías

no era por celos

Saber quería

si era el protagonista



CANCIONES DEL LIMO



Da sed el camino

fatiga el vecino



Me embrujan los limones

como esos que tienes

pero ponles buen precio

a ver si me convienen



De tus ojos salían

una rosa y un clavel

al llegar a los míos

parecían un ciempiés



Para San Juan

la tengo de parto

Dime zagal

¿sabes tú de cuantos?



Si supiera mentiría
y si mintiera diría
que fue el espíritu santo
de las mozuelas bravías




En las zarzas mi morena

dejó una pestaña

la octava que deja

Pienso que voy a dejarla

no sea que una ceja

olvide mañana

lueguito la cara

hasta que no pueda

escapar yo de las zarzas



Me gusta la miel

y… el alivio

por eso me cuelgan

el sambenito…

mas no se dan hongos

en el sequío…

Si tuviese la culpa

de tanto rocío

estarían los hombres

apañaditos


.